Si, es un hecho que hace mucho no escribo con la fluidez y la afluencia que solía hacerlo, creo que desgaste a mi glándula de letras por demasiado tiempo, la forcé, la pisoteé, me burle y abuse de ella.
También es un hecho que las infames brujas feminoides que se han atravesado en mi camino han tenido un costo destructivo y sobrevaluado.
Y con la cabeza en las brumas de la desolación y perdido en la ecléctica búsqueda del yo y cosas un poco más existenciales, llegaste tú.
Y si, quizá estoy oxidado, quizá la conexión de mi corazón y mi mente está demasiado deteriorada, pero hay algo que no tiene nombre, no tiene que ver con mi desconexión de la realidad, ni mi esquizofrenia, es algo en ti, algo ajeno, algo que no alcanzo a entender por más que sumerjo en disertaciones abstractas sobre tu piel y sus fronteras, no, es algo más, algo afuera de mi percepción científica y mecánica… Eres un ser extraordinario, eres pura magia entre mis dedos, eres la promesa de una frontera donde todos los sueños se funden con eso que llamamos realidad.
Y si sonríes, todo es posible;
si estornudas, todo tiene sentido;
si hablas, se respira la magia;
si me abrazas, el cielo esta a nuestros pies;
si crees en mi, nada nos detendrá;
si tu me quieres, todo tendrá sentido;