Un abandono taciturno
consecuentando tus tonterías,
desdeñando tus decisiones,
maldiciéndolas,
viviéndolas,
padeciéndolas.
Esta maldita agonía,
de tu reputa necedad,
vivimos en tus consecuencias
en lo que decidiste arbitrariamente
para los dos;
y mi error fue dejarte decidir,
someter a tu consideración
algo tan sencillo como
lo que yo te quería
a ti.
consecuentando tus tonterías,
desdeñando tus decisiones,
maldiciéndolas,
viviéndolas,
padeciéndolas.
Esta maldita agonía,
de tu reputa necedad,
vivimos en tus consecuencias
en lo que decidiste arbitrariamente
para los dos;
y mi error fue dejarte decidir,
someter a tu consideración
algo tan sencillo como
lo que yo te quería
a ti.