Perdóneme señorita, pero usted está en un error
Dice usted que no la amo,
Dice usted que es un capricho
Y siendo sincero tiene usted razón... así es
Es un capricho que me arranca los pulmones y seguramente que su voz haga callar mi alma es sólo una ilusión, mi corazón a punto de explotar al verla debe ser una cardiopatía
Pero... explícame por qué cuando te miro el día cambia todos sus matices,
Explícame por qué al hablar contigo me pierdo en tus ojos y en ese agujerillo que se hace en tu mejilla al sonreír,
Explícame por qué de pronto quisiera callarte con un beso hasta saturarme de ti,
Explícame por qué susurro versos insanos al verte desde la lejanía,
Explícame por qué no me he ido, por qué no te he dejado atrás, por qué te apareces en cada cosa que hago y en cada persona que miro,
Explícame por qué no dejas de inspirarme, de hacerme sentir vivo, por qué siento mariposas cuando te acercas,
Explícame qué diablos hago sin ti, soy tu poeta, ni modo, ni marcha atrás, nos va a dividir la vida, o tu, o el tiempo, pero yo no.
Perdóneme señorita, pero usted está en un error,
Si esto no es amor, dígame qué carajos lo es...
Quizá respingaría conocer a alguien bien. nadie conoce a dios y miles le profesan fe, yo por lo menos te he visto y he tocado tu piel es mucho más razón para tenerte fe;
Quizá respingaría que compartir momentos y lugares, convivir. si hago todo este lagrimal es por conocerte, si supiera todo de ti de antemano ni siquiera levantaría un dedo, si hago esto es para compartir lo que este por venir, lo que se esconde tras la esquina, lo que aún no sucede, quiero sorprenderme de tus respuestas, de tus actos, si hiciera lo contrarío y supiera todo, todo sería como juzgarte por lo qué has hecho y no soy nadie para eso, así como tu no eres nadie para juzgar mis actos pasados antes de ti;
Quizá dirías finalmente no puede pasar seguido de un adiós, otra conversación o cualquier otra cosa. Yo nací cuando nadie creía en mi, estoy acostumbrado a que no me tengan fe, pero si desafíe a la muerte escapándome una y otra vez de sus garras, no me digas que no puede pasar, que no es posible, mejor dime por una vez que lo vas a pensar.
Perdóneme señorita, pero usted está en un error,
Si esto no es amor, dígame qué carajos lo es...